Blas Infante reflejó los principios de la Masonería en el escudo, el lema y el himno de Andalucía

Blas Infante «reflejó los principios esotéricos y espirituales de la Masonería» en «el escudo, el lema y el himno andaluces«, según explica la edición sevillana del diario ABC. El periódico cita como fuente al propio nieto del Padre de la Patria Andaluza, Estanislao Naranjo, estudioso de la figura y la profunda influencia del simbolismo masónico en el legado de Infante, «quien recuerda que el nacionalismo de su abuelo no se corresponde con el concepto territorialista decimonónico, supremacista y excluyente que impera hoy día y que tantos dolores de cabeza está dando, sino cultural, espiritual«.

«De cómo acabó siendo masón Blas Infante poco se sabe, aunque tuvo que suceder en algún momento entre 1908 y 1914, fecha en la que escribe el Ideal Andaluz, que comienza precisamente con una plancha masónica«, explica el diario sevillano. «En los símbolos de Andalucía encontramos un importante repertorio de signos masónicos que pueden ser descubiertos por todos los andaluces una vez que se explica en qué consisten, cuál es su significado y qué enseñanzas transmiten«, añade.

La visión integradora de la Masonería quedó reflejada en el lema ‘Andalucía por Sí, para España y la Humanidad’, donde «juega un papel fundamental el uso del término Humanidad, que constituye el primero de los elementos con un fuerte componente masónico«. El himno también «contiene una clara referencia masónica que a los no iniciados parece un anhelo cultural: ‘Los andaluces queremos volver a ser lo que fuimos, hombres de luz que a los hombres, almas de hombres les dimos’. Así, para expresar un deseo de volver a la época en la que Andalucía era un foco de luz, de cultura, en el mundo, hace referencia al principio masónico del iluminado, una persona avanzada en el camino hacia la perfección que sirve de guía a otros«. Pero, de todos los símbolos andaluces, «el escudo es el que alberga una mayor carga masónica«. Hércules «representa la dualidad del cielo y el infierno, bajó al averno y regresó liberando a Prometeo y salvando a los hombres, resucitando él mismo como un hombre nuevo, un salvador que en el escudo de Blas Infante lleva una triple diadema como dominador del mundo de la materia, de la mente y del espíritu«, añade el diario.